Politica sanitaria

Congelada la inversión pública en Sanidad

SATSE denuncia que la inversión pública en Sanidad prevista para el próximo año (6,7% PIB) es insuficiente.
José Manuel Miñones, ministro de Sanidad

José Manuel Miñones, ministro de Sanidad

SATSE ha denunciado que la congelación de la inversión pública en Sanidad prevista para el próximo año (6,7 por ciento del Producto Interior Bruto) demuestra que la atención sanitaria sigue sin ser una prioridad para el Ejecutivo. 
 
Una congelación,  según el Plan Presupuestario del Gobierno remitido a la Unión Europea, que se suma a la caída de la inversión pública destinada a Sanidad de cerca de un punto del PIB en los últimos tres años.

Una insuficiente inversión que impide dar respuesta a problemas que preocupan mucho a la sociedad, como las crecientes listas de espera o la saturación en los centros sanitarios. 

Desinversión

Desde 2020 se viene registrando una desinversión en la Sanidad pública como se refleja en los sucesivos planes presupuestarios que el Gobierno ha enviado a Bruselas.

  • 2020. 7,6 por ciento del PIB.
  • 2021.  7,2 por ciento del PIB.
  • 2022.  7 por ciento del PIB.
  • 2023.  6,7 por ciento del PIB. 

 
Una inversión en la Sanidad pública que se encuentra muy por debajo de la que realizan países de nuestro entorno, según datos del Ministerio de Sanidad.  

  • Alemania. 11 por ciento.
  • Francia. 10,4 por ciento.
  • Suecia. 9,6 por ciento.

SATSE insiste en la necesidad de aumentar el gasto sanitario público de forma paulatina en los próximos años y poder atender las necesidades de promoción de la salud, de prevención y asistenciales. 

También propone que se analice en profundidad el gasto sanitario para hacerlo más eficiente y racional, ajustándolo a las verdaderas necesidades de la población y eliminando o reduciendo los gastos que pudieran estar vinculados a posibles bolsas de ineficiencia. 

Preocupación social  

El Sindicato también incide en que esta desinversión paulatina contrasta con la opinión generalizada de la sociedad que en sucesivas encuestas refleja su preocupación por la situación de nuestro sistema sanitario.

El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) manifiesta que la Sanidad es el segundo problema para los españoles a nivel personal. 

Según SATSE, esta infrafinanciación de nuestro sistema sanitario público provoca, entre otros problemas, el paulatino incremento de las listas de espera.   

Falta de recursos 

La falta de suficientes medios materiales y recursos humanos motivada por la insuficiente inversión pública provoca también situaciones cada vez más frecuentes de saturación de unidades, servicios y centros sanitarios.

Una realidad que perjudica la atención a las personas y también al personal sanitario que se ve sobrecargado y tensionado, añade. 
 
El Sindicato asegura que nuestro sistema sanitario no podrá dar una respuesta satisfactoria a los retos actuales y futuros de la sociedad (progresivo envejecimiento, pluripatologías, cronicidad, dependencia…) a no ser que cambie la actual tendencia.

Hay que iniciar una línea ascendente de apuesta presupuestaria por la sanidad pública y sus profesionales. agrega. 
 
SATSE recalca, por último, que invertir en Sanidad nunca debe entenderse como un gasto, sino como una apuesta por la salud y bienestar integral de las personas, y como un motor de riqueza, desarrollo, igualdad y progreso para cualquier país.