Las matronas, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha querido poner en valor la importancia y necesidad del trabajo de las matronas y ha incluido a estas profesionales sanitarias en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Esta decisión de la UNESCO se ha adoptado en la XVIII reunión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, celebrada entre el 5 y 9 de diciembre, en Kasane (República de Botswana).

El organismo de las Naciones Unidas especializado en la educación, la ciencia y la cultura ha resaltado la labor que realizan las matronas con las mujeres embarazadas y sus familias antes, durante y después del parto. 

Derechos fundamentales

Según la UNESCO, estas profesionales sanitarias contribuyen a la protección de los derechos humanos fundamentales, transmitiendo sus conocimientos a las madres y las familias. 

También enfatiza este organismo que su trabajo asistencial y de cuidados se basa en prácticas basadas en la evidencia y en los conocimientos, habilidades y técnicas adquiridas. 

Esta labor varía según los contextos sociales, culturales y naturales de diferentes comunidades y países. Las habilidades y conocimientos relacionados han sido salvaguardados, desarrollados y transmitidos por estas profesionales durante generaciones, especialmente dentro de redes de mujeres. 

Formación

En muchos países, recuerda la UNESCO, se requiere certificación y los conocimientos y habilidades relacionados se transmiten a través de la educación formal, como el aprendizaje académico basado en planes de estudio. 

En España, las matronas, después de cursar los cuatro años de los estudios universitarios de Grado de Enfermería, realizan dos años más de formación sanitaria especializada tras lograr un plaza en base a la prueba selectiva que tienen que realizar.

La inclusión de las matronas en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad supone un importante respaldo a nivel internacional al trabajo de unas profesionales sanitarias esenciales dentro de los sistemas sanitarios y cuyas condiciones laborales son manifiestamente mejorables.

Riesgos

Un informe de la ONU, junto a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Conferencia Internacional de Matronas, alerta de que millones de mujeres y recién nacidos pierden la vida y millones más sufren enfermedades o lesiones. Ambas circunstancias se producen porque no se reconocen ni se priorizan las necesidades de las mujeres embarazadas ni las competencias de las matronas.

Según el informe ‘El estado de las matronas en el mundo 2021’, el mundo se enfrenta a una escasez de 900 000 profesionales, lo que lo que representa un tercio del personal necesario a nivel mundial. 

COVID-19

La crisis de la COVID-19 no hizo más que agravar este problema, ya que las necesidades de salud de las mujeres y los recién nacidos quedaron relegadas a un segundo plano. Así, los servicios se vieron interrumpidos y las matronas fueron destinadas a otros servicios de salud, algo que aún no se ha conseguido recuperar.

Este informe también subraya que la grave escasez de personal se está cobrando un terrible peaje mundial en forma de muertes evitables.

En un análisis realizado para este informe, publicado en la revista especializada The Lancet, se demostró que, si se dotara de todos los recursos necesarios a la atención prestada por estas profesionales para 2035, se podría evitar el 67% de las muertes maternas, el 64% de las muertes neonatales y el 65% de la mortinatalidad. Se calcula que se podrían salvar 4,3 millones de vidas al año.