Politica sanitaria

Aprobada la creación de la Agencia Estatal de Salud Pública

SATSE celebra un paso clave para el SNS, pero insiste en la necesidad de incorporar suficientes enfermeras y recursos.

El Congreso de los Diputados ha dado el visto bueno definitivo a la Ley por la que se crea la Agencia Estatal de Salud Pública (AESAP) y se modifica la Ley 33/2011, de 4 de octubre, General de Salud Pública. Esta aprobación representa un hito fundamental para el Sistema Nacional de Salud al establecer un nuevo organismo diseñado para reforzar la capacidad de respuesta del país ante futuras crisis sanitarias y mejorar la vigilancia y evaluación de los problemas de salud de la población.

El Sindicato de Enfermería recibe esta aprobación como un "paso importante para fortalecer nuestras capacidades frente a futuras crisis sanitarias". No obstante, la organización sindical subraya con firmeza una condición indispensable para el éxito de esta nueva entidad: la integración de un número suficiente de enfermeras en su equipo de profesionales y expertos. Desde SATSE insistimos en que la AESAP debe contar con los medios y recursos necesarios y, crucialmente, trabajar de manera "despolitizada", basándose únicamente en criterios técnicos y profesionales.

Enfermería, contribución esencial

La voz de la enfermería, a través de SATSE, ha sido clara desde el inicio del proceso: la experiencia y capacitación de las enfermeras, especialmente las especialistas en Familiar y Comunitaria, son vitales para la Agencia. Estos profesionales pueden aportar su dilatada experiencia en ámbitos clave como la prevención y control de enfermedades, la vigilancia epidemiológica y el desarrollo de intervenciones y actuaciones de promoción de la salud pública. Su rol como interlocutores habituales en el ámbito de la salud comunitaria les permite obtener resultados positivos en la vertiente más operativa de la Agencia.


 

La pandemia de la COVID-19 puso de manifiesto de forma dramática la necesidad de contar con un órgano central que coordine y refuerce la vigilancia epidemiológica y que establezca mecanismos ágiles para dar respuesta a cualquier amenaza sanitaria. La creación de la AESAP busca precisamente cubrir esta laguna, anticipándose a nuevos retos en salud pública y alineándose con las exigencias de un entorno global cada vez más complejo.

Desde SATSE enfatizamos que las enfermeras no solo pueden colaborar en la propuesta de nuevas actuaciones de prevención y control de enfermedades y de protección de la salud, sino que su formación les capacita para trabajar activamente en el diseño y evaluación de políticas e intervenciones en diversos entornos, sanitarios y no sanitarios. Su contribución es esencial para reducir las desigualdades sociales en salud, favoreciendo un enfoque integral de "salud en todas las políticas". Además, el sindicato resalta que las enfermeras pueden contribuir significativamente al desarrollo profesional de quienes trabajan en el fomento de la salud pública, propiciando su capacitación y la retención de sus capacidades dentro del sistema.

La nueva Agencia Estatal de Salud Pública tendrá como objetivo principal la evaluación del estado de salud de la población, el seguimiento y la vigilancia en salud pública, así como la detección precoz y la evaluación de riesgos para la salud. Su estructura y funcionamiento buscarán la eficiencia en la gestión de la salud pública, una tarea en la que la visión holística y la capacidad de gestión de casos de las enfermeras son un valor añadido incuestionable. La Ley modificada también regulará el régimen de personal, económico, financiero, patrimonial, de contratación, presupuestario, de contabilidad y de control económico-financiero de la AESAP.

Ahora, con la ley aprobada, el foco se trasladará a su implementación efectiva y a la dotación de los recursos humanos y materiales necesarios para que la Agencia cumpla con sus ambiciosos objetivos. Para el Sindicato de Enfermería, el verdadero éxito de esta iniciativa radicará en que la AESAP se convierta en un organismo robusto, con voz técnica independiente y, sobre todo, que integre y valore la experiencia de todos los profesionales sanitarios, muy especialmente de las enfermeras, cuyo papel es insustituible en la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad. La creación de la Agencia no solo es un acto legislativo, sino la oportunidad de construir una salud pública más resiliente y preparada para el futuro, con la enfermería en un lugar central.